martes, 22 de abril de 2008

CONTENIDOS DE CULTURA TECNOLÓGICA PARA LA FORMACIÓN DE PROFESORES

Normalmente, las posturas que podemos encontrar en los profesionales de la enseñanza con respecto a las nuevas tecnologías, es la de una irreflexiva aceptación de este cambio, lo que da lugar a una postura pasiva de los docentes, una postura que los profesores deben superar.
El desarrollo de las Nuevas Tecnologías en nuestra sociedad conlleva a la aparición de nuevos medios, nuevos lenguajes, nuevos dispositivos para tratar la información, nuevas redes para difundirla, etc. Así pues si la sociedad no puede quedarse como mera espectadora de este cambio, aún menos lo pueden hacer los docentes.
“Una revolución tecnológica, centrada en torno a las tecnologías de la información, está modificando la base material de la sociedad a un ritmo aceleado” (Castells 1997)
Se pueden diferenciar 3 dimensiones importantes en lo que respecta a la formación del profesorado en las Nuevas Tecnologías Multimedia (NTM):
a) Conocimiento del potencial didáctico de las NTM:
La utilización de NTM como un recurso didáctico, supone una variación en las metodologías y medios que se utilizan en las situaciones de enseñanza-aprendizaje. Esta variedad tiene dos ventajas: la atención a la diversidad y el desarrollo de las variadas destrezas que permitan realizar aprendizaje autónomo.
La incorporación de nuevos medios, va a permitir superar el esquema de que el profesor es el transmisor de información y el alumno solo es un receptor pasivo; para pasar a un modelo multidireccional donde el alumno va a ir construyendo su propio aprendizaje con ayuda del profesor.
b) Conocimiento del potencial educativo de las NTM:
El profesor también necesita conocer las implicaciones de uso de dichas tecnologías. El contacto del aluno con los documentos multimedia de las pantallas no sólo condiciona su forma de ver el mundo, sino también su manera de seleccionar, ordenar, procesar la información en el aprendizaje intencionado…
El profesor además debe coordinar la función educativa de los medios con la de otros agentes como la familia, la escuela, el barrio, o la religión.
c) Conocimiento del contexto didáctico y educativo de las NTM:
Los docentes responsables, deben procurar que su programación esté inspirada en un contexto amplio, desde el proyecto educativo del centro hasta el tipo de sociedad que viven sus alumnos, el tipo de documentos con los que va a tener que trabajar y los sistemas de comunicación en los que se verán implicados.
El desarrollo de las NTM está jugando un papel importante en la configuración de la sociedad global del tercer milenio.
- Podemos comprobar cómo en la mayor parte de las escuelas, el libro de texto continúa siendo el referente fundamental y la herramienta que enmarca una gran parte de las tareas realizadas en el aula. Si bien es cierto que cada vez se eleva el número de docentes que utiliza los medios basados en las nuevas tecnologías, su uso continúa siendo poco frecuente, sobre todo si lo comparamos con el libro de texto y otros medios impresos tradicionales.
Convencidos de la necesidad de implementar la tecnología como modelo para la intervención docente, urge capacitar a los profesores en el dominio de estos nuevos lenguajes de comunicación a través de una pedagogía de la imagen y del uso racional y crítico de los recursos tecnológicos en su aplicación a la educación. De ahí que hoy uno de los principales retos que tienen que afrontar las instituciones escolares sea la capacitación de los docentes en el dominio de la Tecnología de la Información y de la Comunicación adaptada a sus contextos de intervención.
Si pretendemos integrar las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación en los distintos escenarios educativos, será preciso contar con un elevado número de profesores en dichos escenarios que conozcan cómo utilizar dichas tecnologías y que su empleo no se limite a algún grupo aislado de profesores con el espíritu característico de los pioneros. Por tanto, se hace cada vez más imprescindible crear las condiciones favorables a través de medidas de apoyo a los profesores, donde se reconozca por parte de las autoridades académicas su esfuerzo y resultados.
En repetidas ocasiones hemos podido escuchar que una de las claves para que la integración curricular de las nuevas tecnologías se haga realidad consiste en el uso de éstas en la formación de los profesores.
El profesor Vázquez Gómez (1994: 58) manifiesta que la introducción de las NTI en la formación de los profesores significa, por de pronto, tres cosas:
Introducir el enfoque tecnológico en la formación de los profesores.
utilizar las nuevas tecnologías, tanto en su formación, como en su perfeccionamiento;
seleccionar aquellas tecnologías que tienen mayor potencialidad pedagógica (tecnologías interactivas y que se adaptan mejor a la simulación del pensamiento humano y, en concreto, al pensamiento del alumno, del profesor y a la calidad de las interacciones entre ambos.
Apoyándonos en los argumentos utilizados por el profesor Medina Rivilla (1989), podemos señalar tres aspectos fundamentales que justifican la necesidad de una formación tecnológica del profesorado, y que podrían entenderse como objetivos prioritarios en la formación en Nuevas Tecnologías Aplicadas a la Educación de los futuros maestros.:
Mejorar la interpretación y concepción tecnológica de la enseñanza desde el protagonismo reflexivo del profesor como generador de currículum y estilos de enseñanza.
Alcanzar una concepción tecnológica apoyada en una fundamentación científica del proceso enseñanza-aprendizaje y en la actualización artístico-reflexiva en el aula.
Ayudar al profesorado a gestionar y organizar adecuadamente los medios que han de utilizar en el aula y en el centro.

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